La mejor manera de conectarte con la iglesia y hacer amigos de verdad son los Grupos de Vida. Son reuniones semanales donde el principal objetivo es compartir y tener la oportunidad de formar relaciones fuertes con personas que caminan en la vida cristiana. Son un recordatorio de que no estamos solos en ese camino, y que otras personas también tienen problemas, temores, alegrías, tentaciones y triunfos. Lo que hace estos grupos diferentes es que podemos encontrar un espacio donde compartir acerca de nuestras vidas a la vez que podemos escuchar y aprender de lo que los demás comparten. Esas conversaciones están por lo general basadas en algún texto de la Biblia que escuchamos en el sermón del domingo, o también en diferentes temas que de la misma manera son de relevancia para la vida diaria y el crecimiento espiritual.

Hay grupos para todos los gustos: para mujeres, para gente joven, para parejas, para hombres, y grupos mixtos. No importa cuál grupo escojas, lo importante es pertenecer a uno. Tenemos claro que la transformación de la que habla la Biblia solamente puede ocurrir y madurar cuando estamos en comunidad, unidos a otros. Tal vez las primeras sesiones van a ser un poco incómodas, pero hay que estar dispuestos a incomodarse cuando sabemos que debemos crecer y madurar. Nuestros grupos no son perfectos, pero la meta es que sean honestos y transparentes. Van a ser lugares donde encontrarás amigos, recibiras ánimo, y vas a conocer mejor a Jesús.